En un mundo donde las plantas suelen ser vistas como simples adornos, nosotros pensamos diferente. Cada cactus cuenta una historia, una batalla silenciosa contra el tiempo y el entorno. Son esculturas vivas que han aprendido a florecer en la adversidad, a resistir con elegancia y a sorprender con formas que desafían la lógica.

Así nació Joyas del Desierto, no como una simple tienda, sino como un tributo a estas maravillas naturales. Desde San Sebastián, Gipuzkoa, hemos reunido una colección de cactus y suculentas que no solo destacan por su belleza, sino por su rareza y carácter. No son solo plantas, son piezas únicas que esperan encontrar su lugar en el mundo.